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Incendios en las sierras: relatos en primera persona

El salliquelense Martín Rodríguez Dómine, radicado en Alpa Corral; y Leonardo Eleno, uno de los bomberos voluntarios de Villa Maza que viajaron a colaborar en los siniestros, brindaron su testimonio a este medio.

Martín Rodríguez Dómine es un artesano y comunicador social salliquelense de 41 años de edad que vive desde 2008 en la localidad Alpa Corral, en el sur de la provincia de Córdoba. La pasada semana, el lugar sufrió tres focos de incendio simultáneos, y Rodríguez afirma que, de acuerdo a datos brindados por bomberos voluntarios, el 95% de los incendios se originan de manera intencional.

“Vivimos una situación tremenda por las condiciones climáticas, porque venimos de una gran sequía y hay mucho combustible y viento en el monte, quienes prendieron fuego sabían que iban a provocar un desastre, como el que fue”, denuncia, agregando que en Alpa Corral, y en todos los pueblos de la localidad, “se quemó casi en su totalidad el monte nativo y también los pinares, que no son monte nativo pero tienen una gran extensión, vienen desde el límite con San Luis hasta esta zona”.

El escenario relatado por el salliquelense a Veradia.com en relación a los siniestros es dramático, cuenta que el martes 29 de septiembre el pueblo se vio prácticamente rodeado por llamas y humo, “los bomberos voluntarios estaban desbordados, si bien vinieron dotaciones de otras localidades no daban abasto porque el fuego viajaba a muchísima velocidad”, describe Rodríguez, quien forma parte del grupo de guardas ambientales voluntarios que se puso a disposición de los esfuerzos por apagar el fuego y realizar las guardias de cenizas, al igual que gran parte de la comunidad que también colaboró con las tareas.

“Lamentablemente la situación de la zona no escapa a lo que pasa en el resto de las sierras de Córdoba donde se quemaron en total 191 mil hectáreas, en su gran mayoría de monte nativo”, cuenta con pesar, y sostiene que “esto es parte de una política llevada adelante por el gobierno de la provincia con los sectores inmobiliarios y agroganaderos que quieren modificar la ley de bosques desde hace muchos años, para quitar la protección a los bosques nativos, y como la gran presión social impidió su modificación tomaron la decisión de quemarlos, porque no es casualidad que se haya quemado justamente la parte más protegida, hay mucha evidencia de que esto está hecho a propósito”.

Profundizando su denuncia, afirma que el gobierno provincial anuló meses atrás los sistemas de vigías de detención temprana de incendios, “que hubieran permitido sofocarlos con anterioridad, y a su vez demoró muchísimo en aceptar los brigadistas y aviones hidrantes ofrecidos por la nación y otras provincias”. Respecto a estas acusaciones, existe una denuncia formal al gobernador Juan Schiaretti por parte de FUNAM (Fundación para la defensa del ambiente).

La planta urbana de Alpa Corral se encuentra fuera de peligro aproximadamente desde el pasado domingo, aunque algunos pequeños focos pudieron observarse días después. “Fueron 9 días de un trabajo permanente, sin dormir, estuvimos día y noche apagando, fue tremendo, agotador. El pueblo llegó a estar prácticamente rodeado y no sabíamos si salíamos vivos o no”, concluyó el sentido relato de Rodríguez.

 

Bomberos de Villa Maza viajaron a colaborar

Dando respuesta a la convocatoria realizada por la Federación de Asociaciones de Bomberos Voluntarios de la Provincia de Buenos Aires, una dotación del Cuartel de Villa Maza viajó a prestar colaboración en los incendios que azotaron a Córdoba y San Luis.

En principio el destino de la dotación, conformada por los efectivos Mario Muller, Juan Marambio, Leonardo Eleno; y el Jefe de Cuerpo Víctor Álvarez, tenía como destino Córdoba, pero finalmente, luego de un pedido de apoyo, se dirigieron a San Luis.

El sábado en horas de la mañana partieron desde Villa Maza, concentrándose en La Carlota, Córdoba, con las demás dotaciones pertenecientes a la Federación y desde allí partieron a Naschel, San Luis, donde fueron hisopados de manera preventiva y una vez obtenidos los resultados negativos para COVID-19 se dirigieron a La Punilla, en el límite con Córdoba.

“Fuimos unas 7 dotaciones, pero después terminaron yendo todas porque el incendio era muy importante”, contó Leonardo Eleno a este medio, quien definió el panorama a enfrentar como desolador, “nos encontramos con gente corriendo y gritando por sus casas, desesperada porque el fuego se metía al pueblo”.

Tras unas cuatro horas de trabajo, junto a los bomberos de la zona y con la colaboración de los mismos vecinos, lograron extinguir el siniestro y regresaron a pasar la noche a Naschel. Al día siguiente partieron hacia Achiras, Córdoba, donde prestaron servicio los días martes y miércoles, para emprender el regreso a Villa Maza el jueves en horas de la mañana.

“Volvimos muy satisfechos con el trabajo realizado y con la despedida que nos dio la gente de Achiras, que estaba muy agradecida, por más que hacíamos fuerza alguna lagrimita se caía, porque fue muy emocionante”, afirmó Eleno, destacando también el recibimiento de los vecinos de Villa Maza que los esperaron en el acceso a la localidad.

Al arribar, la dotación decidió someterse a un test rápido de COVID-19 en el Hospital y luego fueron hacia el Cuartel donde eran esperados por sus familiares y compañeros. “Nos quedaron experiencias muy lindas, pero con respecto a los incendios espero que no se repitan, porque ver cómo queda todo después es un paisaje realmente muy desolador”.