El Municipio de Pellegrini realiza trabajos de concientización respecto a la tenencia de mascotas de razas potencialmente peligrosas, entendiendo que van en aumento los reclamos de los vecinos que conviven en sus barrios con mascotas de estas características.
En este marco, Veradia.com se contactó con el Médico Veterinario Santiago Libertini, Director de la Cabina Bromatológica, para tener una noción acerca de cuáles serían los cuidados y los peligros a tener en cuenta. Al respecto, advirtió: “cuando nos referimos a razas potencialmente peligrosas, tenemos que apuntar a la capacidad de mordida que tienen estos animales, puede ser un animal bueno, dócil y amigable, pero la fuerza de la mordida la va a tener siempre, por instinto”. La Ley Nacional de Animales Peligrosos, establece que estos animales deben estar asentados en un registro especial, encuadrados dentro de las razas potencialmente peligrosas.
“Estas razas tienen un grado de actividad alto, elevado, en general son hiperactivas, entonces necesitan que el dueño los saque a pasear todos los días armándoles una rutina de ejercicios, para que gasten energías”, sostuvo Libertini, agregando que, además, la vivienda debe contar con las condiciones necesarias para que el animal no sea largado a la calle.
En cuanto a los motivos y las consecuencias de un eventual ataque, indicó que “cuando el perro se siente atacado en su territorio se defiende, porque hablamos de animales territoriales, y cuando esto pasa, ya conoce su capacidad de mordida, por instinto se defiende y al tener una capacidad de mordida grande, pueden llegar a ocasionar daños irreversibles”. Además, cuando pelean con otros perros, “el grado de excitación que alcanzan es tan grande que hasta llegan a desconocer a su dueño, inclusive hubo casos donde los dueños han sido mordidos por sus propios perros, en los intentos de separarlos de estas peleas”.
En Pellegrini se puso de manifiesto la Ley antes mencionada, a través de una Ordenanza Municipal que establece, entre otras cuestiones, que antes de los seis meses (como tiempo límite), el animal debe ser registrado para darle al propietario la forma de manejo, posteriormente se realiza la colocación de un chip gratuito por parte de Cabina Bromatológica, para poder hacer un seguimiento. Además, se le entrega al dueño una serie de características y normas que se deben seguir para evitar sanciones. Estas sanciones incluyen notificaciones, que de ser frecuentes se convierten en una multa, y en el caso de reiteradas denuncias se retira el animal a su dueño. Posteriormente, previo pago de sanciones, se hace entrega del animal con la condición de que pueda contar con un lugar apropiado y todas las condiciones necesarias.
Para finalizar, Libertini remarcó la importancia de ser responsables con la tenencia de este tipo de mascotas y recordó que en caso de haber inconvenientes el responsable será el propietario, “estos animales no pueden estar en la vía pública, es necesario entender que pueden generar un riesgo para la comunidad”, advirtió.
