El salliquelense Diego Gabilondo y su pareja, Amanda Lemble, completaron en horas del mediodía del sábado un viaje a caballo que les demandó casi 11 días de travesía.
Partieron desde el campo en el que viven, ubicado entre las localidades de Tres Arroyos y Adolfo Gonzales Chaves, el pasado miércoles 29 de marzo junto a tres compañeros equinos: Tordo, Manchas y Argentina, de los cuales Amanda destacó que “se portaron bárbaro los tres”.
“La idea surgió hace casi dos años por las ganas de reconectar un poco más con el caballo, que siempre nos gustó. En función de eso nos fuimos organizando, porque teníamos que preparar algún otro caballo y las cosas que necesitábamos”, le contó Gabilondo a Veradia.com.
La pareja conocía la ruta a transitar, pero no planificó en que lugares pararían a descansar. Llevaron carpa y víveres, se reabastecieron a mitad de camino, y completaron así un recorrido de casi 400 kilómetros.
“Encontramos muchísima hospitalidad durante todo el trayecto, por eso fuimos alternando pasar la noche en la carpa con dormir en una casa o en algún campo. La verdad que la gente nos dio un apoyo y un cariño muy conmovedor”, describió Gabilondo.
“Es la primera cabalgata que hacemos y nos fue bárbaro, no tuvimos mayores inconvenientes”, dijo Lemble por su parte, agregando: “Salimos con la idea de hacer algo entre nosotros, pero fue increíble como la gente se fue sumando. Nos salían a buscar y nos alcanzaban cosas, algunos se emocionaban, nos cebaban mate en la ruta, se sacaban fotos con nosotros, nos daban sus contactos de teléfono y nos escribían para saber si íbamos bien, no nos imaginábamos que iba a pasar algo así”.
El padre de Diego, José Luis Gabilondo, quien falleció en el mes de diciembre del año 2020, fue uno de los impulsores de la Agrupación Tradicionalista “El Entrepelo” y realizó una cabalgata a Luján, de la cual se cumplieron justamente el pasado sábado 5 años. “Papá siempre fue un motor de muchas cosas y compartíamos con él y mis hermanos la pasión por el caballo. No pude ir a Luján cuando fueron los de la agrupación, y eso es algo que me quedó en el tintero, así que esta travesía también tiene que ver con eso”, dijo Diego.
Varios integrantes de esta agrupación fueron al encuentro de la pareja, acompañándolos en los últimos kilómetros del viaje. “Son personas que también apreciaron y aprecian mucho a mi papá, que lo tienen muy presente igual que nosotros”, afirmó, para luego agregar: “Es muy gratificante que hayan salido a esperarnos, hay muchos chicos en la agrupación, con energía muy linda, y verlos disfrutar de esto es hermoso, es la mejor manera de cerrar la travesía. Los felicito por lo que hacen y espero que se sume gente, porque el caballo tiene muchas cosas buenas para dar”.
Pasadas las 13:30 hs, la pareja de jinetes intercambió saludos con otros integrantes de la agrupación y familiares que los aguardaban en inmediaciones del cementerio, ya que llegaron por el camino de tierra lindante al predio, y continuaron su marcha hasta la quinta familiar, donde compartieron todos juntos un asado preparado espacialmente para la ocasión.
