Gustavo Fabián Amorena y Walter Sergio Arol Coña, únicos imputados por el crimen de Norberto “Pocho” Farías, fueron absueltos en fallo unánime por el Tribunal Oral Criminal N° 1. El fiscal Manuel Iglesias, quien llevó adelante la acusación, aseguró que fue un juicio complejo por el paso del tiempo y que muchos testigos parecían tener miedo.
En diálogo con Veradia.com el Dr. Iglesias afirmó: “Se trata de un homicidio calificado con mucha trascendencia en la región y después de tanto tiempo hubo muchos olvidos, había testigos que parecían tener miedo y estaban muy nerviosos, frente a nosotros declararon una cosa y después en el juicio declararon otra”.
El veredicto absolutorio firmado por unanimidad por los jueces Marcelo Centeno, María Gabriela Martínez y Guillermo Pueblas no estuvo exento de críticas y cuestionamientos a las prácticas de la policía bonaerense de aquel entonces y a la intromisión en el caso del poder político en la localidad de Tres Lomas. Con respecto a esto el Fiscal comentó: “Manifesté en el inicio del alegato que hubo ciertas desprolijidades, cuando reabrimos la causa en el año 2010 nos encontramos con cosas que no se pudieron corregir porque estaban mal desde el principio, no obstante eso con el equipo de la Fiscalía estábamos convencidos de la materialidad y la autoría de los imputados que presentamos en el juicio. Considerábamos que con el cumulo de indicios concordantes presentados se podía efectuar la condena de estas personas”.
La decisión del Tribunal tiene su justificación en que la investigación no logró probar que Gustavo Fabián Amorena y Walter Sergio Arol Coña tuvieran participación directa con el crimen ya que no encontraron a lo largo del recorrido de indicios y declaraciones testimoniales datos contundentes que los situaran en la escena del crimen ni un móvil para cometer el asesinato.
“El fallo habla mucho sobre los errores que se cometieron en el comienzo de la instrucción – explicó el Fiscal – eso fue como un juego de dominó donde cae una ficha y hace tambalear a todas las demás. Hacen referencia a la mala actuación del médico de policía de Tres Lomas, quien pudo haber tenido algún error en el momento pero estuvo presente en el juicio y quedó muy claro lo que explicó, además la Dra. Mollo, Titular del Instituto de Investigación Criminal y Ciencias Forenses de Junín, a través de una videoconferencia explicó muy bien como fue la modalidad, como se pudo haber dado el ataque y la pluralidad de personas. Por eso si bien hubo errores se fueron corrigiendo”.
El Fiscal Iglesias también aseguró que había pruebas contundentes respecto de la autoría del crimen por parte de los imputados: “Son pruebas que la gente no pudo ver en el juicio pero que los jueces las tenían a la vista. He pedido falso testimonio de una persona que situaba a los imputados en el lugar del hecho unas horas antes del crimen y la resolución judicial no dice nada al respecto”.
El fallo del Tribunal Oral Criminal N° 1 será apelado, así a lo informó el Fiscal: “Estamos evaluando diferentes cuestiones con el equipo para presentar el correspondiente recurso de casación, vamos a apelar porque seguimos sosteniendo nuestra hipótesis, con el convencimiento que tenemos vamos ir hasta las últimas instancias”.
La resolución judicial también solicita que se inicie un proceso judicial por presuntos delitos de acción pública cometidos “prima facie” contra el médico forense que hizo la primera autopsia, Juan Héctor Furch, y los policías treslomenses que instruyeron los primeros pasos de la investigación, el entonces Comisario de Tres Lomas Adrián Carlos Lescano, el jefe de calle Roberto Oscar Beldrío y el agente que llegó primero a la escena del crimen Martín Darío Peñas.
En diálogo con Veradia.com el Dr. Iglesias afirmó: “Se trata de un homicidio calificado con mucha trascendencia en la región y después de tanto tiempo hubo muchos olvidos, había testigos que parecían tener miedo y estaban muy nerviosos, frente a nosotros declararon una cosa y después en el juicio declararon otra”.
El veredicto absolutorio firmado por unanimidad por los jueces Marcelo Centeno, María Gabriela Martínez y Guillermo Pueblas no estuvo exento de críticas y cuestionamientos a las prácticas de la policía bonaerense de aquel entonces y a la intromisión en el caso del poder político en la localidad de Tres Lomas. Con respecto a esto el Fiscal comentó: “Manifesté en el inicio del alegato que hubo ciertas desprolijidades, cuando reabrimos la causa en el año 2010 nos encontramos con cosas que no se pudieron corregir porque estaban mal desde el principio, no obstante eso con el equipo de la Fiscalía estábamos convencidos de la materialidad y la autoría de los imputados que presentamos en el juicio. Considerábamos que con el cumulo de indicios concordantes presentados se podía efectuar la condena de estas personas”.
La decisión del Tribunal tiene su justificación en que la investigación no logró probar que Gustavo Fabián Amorena y Walter Sergio Arol Coña tuvieran participación directa con el crimen ya que no encontraron a lo largo del recorrido de indicios y declaraciones testimoniales datos contundentes que los situaran en la escena del crimen ni un móvil para cometer el asesinato.
“El fallo habla mucho sobre los errores que se cometieron en el comienzo de la instrucción – explicó el Fiscal – eso fue como un juego de dominó donde cae una ficha y hace tambalear a todas las demás. Hacen referencia a la mala actuación del médico de policía de Tres Lomas, quien pudo haber tenido algún error en el momento pero estuvo presente en el juicio y quedó muy claro lo que explicó, además la Dra. Mollo, Titular del Instituto de Investigación Criminal y Ciencias Forenses de Junín, a través de una videoconferencia explicó muy bien como fue la modalidad, como se pudo haber dado el ataque y la pluralidad de personas. Por eso si bien hubo errores se fueron corrigiendo”.
El Fiscal Iglesias también aseguró que había pruebas contundentes respecto de la autoría del crimen por parte de los imputados: “Son pruebas que la gente no pudo ver en el juicio pero que los jueces las tenían a la vista. He pedido falso testimonio de una persona que situaba a los imputados en el lugar del hecho unas horas antes del crimen y la resolución judicial no dice nada al respecto”.
El fallo del Tribunal Oral Criminal N° 1 será apelado, así a lo informó el Fiscal: “Estamos evaluando diferentes cuestiones con el equipo para presentar el correspondiente recurso de casación, vamos a apelar porque seguimos sosteniendo nuestra hipótesis, con el convencimiento que tenemos vamos ir hasta las últimas instancias”.
La resolución judicial también solicita que se inicie un proceso judicial por presuntos delitos de acción pública cometidos “prima facie” contra el médico forense que hizo la primera autopsia, Juan Héctor Furch, y los policías treslomenses que instruyeron los primeros pasos de la investigación, el entonces Comisario de Tres Lomas Adrián Carlos Lescano, el jefe de calle Roberto Oscar Beldrío y el agente que llegó primero a la escena del crimen Martín Darío Peñas.
